Tras el impacto económico de la crisis generada por la COVID-19, es necesario impulsar la reactivación económica en un conjunto de sectores empresariales que orienten dicha reactivación en el marco de la transición energética que necesita nuestro país. Para dar respuesta a medio plazo, se ha puesto en marcha un ambicioso Fondo de Recuperación y Resiliencia, para contribuir al proceso de reconstrucción de las economías en el mundo post-COVID, a partir de 2021.
Este Plan tiene entre sus objetivos que nuestro país apueste por la «descarbonización», invirtiendo en infraestructuras verdes, de manera que se transite desde las energías fósiles hasta un sistema energético limpio, siendo la transición ecológica uno de los cuatro ejes transversales del Plan en nuestro país.
Dentro de los objetivos que contempla el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, una de las líneas de acción del impulso a la transición verde es la componente 1, Plan de choque de movilidad sostenible, segura y conectada en entornos urbanos y metropolitanos. Esta componente incluye, entre otros, la «inversión 2» (C1. I2) el despliegue masivo de infraestructura de recarga como clave para el impulso del vehículo eléctrico, la sustitución de la flota de vehículos por modelos eléctricos y el impulso a la innovación en la electromovilidad.
El programa de incentivos que se aprueba por esta orden, contribuye a la ejecución de las actuaciones que se enmarcan dentro de la mencionada componente 1, formando parte de la inversión 2 del Componente 1 (C1. I2), así como a la consecución de sus hitos, y será complementado con otros programas en el marco de la misma componente, como son los recientemente aprobados Programas MOVES III.
En el PERTE VEC se recoge el programa MOVES singulares II como una de las medidas facilitadoras que, sin actuar directamente sobre la cadena de valor, coadyuvan tanto a la creación de una nueva movilidad como al desarrollo del vehículo eléctrico, en este caso, permitiendo impulsar la innovación y los nuevos modelos de negocio en movilidad eléctrica.
Por ello, a fin de promover la electrificación de la movilidad eléctrica en general y la innovación en particular, el impulso a la industria y al sector empresarial asociado, y siguiendo la línea de ediciones anteriores del Programa MOVES Singulares, se aprueba un nuevo programa de incentivos dirigido a proyectos singulares, cuya singularidad es la
innovación en la cadena de valor de la movilidad eléctrica.
Respecto a la primera edición de MOVES Proyectos Singulares se han modificado determinados aspectos para centrar el objeto del actual programa de incentivos, completando así iniciativas de otros departamentos ministeriales, así como optimizando la gestión y concesión de las ayudas.
Para el diseño del programa de incentivos de esta orden se ha tomado como base no solo el resultado de la primera edición del Programa MOVES Proyectos Singulares, al que se presentaron 130 proyectos, sino también, el resultado de la Manifestación de Expresión de Interés, realizada en diciembre de 2020, relativa a movilidad eléctrica.
Las inversiones deberán cumplir una de las condiciones siguientes:
- Deberán permitir al beneficiario incrementar el nivel de protección medioambiental derivado de sus actividades superando las normas de la Unión aplicables, independientemente de la existencia de normas nacionales obligatorias más estrictas que las de la Unión.
- Deberán permitir al beneficiario aumentar el nivel de protección medioambiental derivado de sus actividades en ausencia de normas de la Unión.
Se mantiene el carácter incentivador de las ayudas, por lo que solo se admitirán solicitudes de proyectos cuya ejecución no se haya iniciado con anterioridad a la fecha de registro de la solicitud de ayuda.
Puede consultar más información a través del siguiente enlace.
Fuente: BOE