El informe, elaborado por BusinessEurope, Eurochambres y SMEunited, y presentado en el marco de la SME Week 2024, aborda los nuevos elementos introducidos por la Comisión Europea en los trabajos preparatorios de una propuesta legislativa y evaluar hasta qué punto se tiene en cuenta el impacto sobre las PYME y el riesgo de posibles cargas adicionales.

Para ello, se analizaron 23 evaluaciones de impacto sobre la base de las directrices para legislar mejor (2021) y la caja de herramientas (2023) de la Comisión Europea, concluyendo que el Test PYME aún no se aplica de forma sistemática y coherente en todos los servicios de la institución, con 7 de 23 iniciativas que no incluían un capítulo específico sobre las PYME, 6 que no respetaban las 12 semanas de consulta o 12 cuyo periodo coincidía con el estival, además de constatar que en 10 de las 23 no se llevó a cabo un análisis cuantitativo sobre su impacto.

Por todo ello, las tres organizaciones proponen:

  1. Mejorar la identificación de las empresas afectadas, incluyendo una justificación clara para la publicación de la propuesta y una evaluación precisa por tamaño de empresa de su impacto en las PYME
  2. Ampliar el alcance de la consulta a los stakeholders, con unas consultas públicas disponibles en las 24 lenguas oficiales de la UE desde el primer día y unos criterios de selección de los participantes de una consulta específica más transparentes
  3. Mejorar el método de cuantificación del impacto sobre las PYME y el reflejo de los resultados del Filtro PYME en la evaluación de impacto
  4. Minimizar el impacto negativo, con unas medidas paliativas claras, fáciles de aplicar y que aborden los problemas detectados en su conjunto