El Consejo de Ministros aprobó ayer un paquete de medidas destinadas a reforzar las capacidades de ciberseguridad y ciberdefensa de las Fuerzas Armadas, con una inversión global superior a los 117 millones de euros. Las actuaciones se enmarcan en el Plan Industrial y Tecnológico para la Seguridad y la Defensa, que responde a un contexto internacional marcado por la creciente beligerancia y el auge de amenazas híbridas.
Entre las iniciativas destaca la potenciación de las capacidades de la Fuerza de Operaciones en el Ciberespacio, dotada con 25,5 millones de euros, que permitirá al Mando Conjunto del Ciberespacio (MCCE) modernizar su equipamiento y software, ampliando su capacidad de computación y almacenamiento para hacer frente a las nuevas ciberamenazas.
Asimismo, el Ejecutivo ha dado luz verde a la construcción del NATO Cyber Range en la Base de Retamares, con un presupuesto de 17 millones de euros. Esta infraestructura proporcionará al MCCE un entorno avanzado de simulación y prevención de ciberataques.
En paralelo, se acometerá la urbanización de una nueva parcela en la misma base para unificar los distintos servicios del MCCE, cumpliendo con los más estrictos requisitos de ciberseguridad. La inversión prevista en este apartado asciende a 15,75 millones de euros.
Otra de las piezas clave del plan es la construcción del Centro de Operaciones del Ciberespacio (CyOC) en Retamares, también con un presupuesto de 17 millones de euros. Este centro permitirá realizar simulaciones de escenarios reales para formación, entrenamiento, validación de tecnologías y experimentación en materia de ciberdefensa.
Finalmente, se autorizó la construcción del Centro de Respuestas ante Emergencias Informáticas (ESPDEF-CERT), igualmente en Retamares, con la mayor partida presupuestaria: 42,25 millones de euros. Esta instalación estará destinada a adiestrar al personal en la protección de los elementos críticos de Defensa frente a amenazas y emergencias en el ciberespacio.
Con estas medidas, el Gobierno busca fortalecer la capacidad de respuesta nacional frente a ciberataques, consolidando a España como un socio comprometido con la seguridad colectiva en el ámbito de la OTAN y adaptando sus capacidades a los desafíos tecnológicos del presente.
Fuente: Consejo de Ministros