La compañía española NTGS ha confirmado recientemente la participación de su portamortero Alakran en un ejercicio organizado en la Base Quantico de la Infantería de Marina de Estados Unidos, donde los Marines evaluaron sus capacidades tras integrarlo en un vehículo Polaris Government and Defense.
Durante el Marine Gunners Symposium, celebrado en Quantico, las empresas Global Military Productos —socio de NTGS para el mercado estadounidense— y Polaris Government and Defense llevaron a cabo un ejercicio de tiro con fuego real empleando el mortero Scorpion Light, nombre comercial con el que se comercializa el Alakran en Estados Unidos. Según NTGS, la versión del Alakran utilizada montaba un tubo de 81 mm integrado en un vehículo MRZR 6×6 de Polaris, una variante ampliada del conocido MRZR 4×4. Desde esta plataforma 6×6, que ofrece mayor superficie de carga (permitiendo transportar hasta 48 proyectiles de 81 mm) y mantiene aproximadamente un 90 % de piezas en común con la variante 4×4, se realizó el ejercicio evaluado por personal de la Infantería de Marina.
NTGS destaca que el principal valor del Alakran es su capacidad para combinar la movilidad y versatilidad de vehículos tácticos ligeros con la potencia de un mortero de 81 mm (y en otros modelos, de 120 mm). Esta combinación, según la empresa, facilita el despliegue rápido de potencia de fuego en terrenos difíciles o inaccesibles para plataformas más pesadas y permite su transporte en operaciones aéreas o marítimas.
NTGS: producto y diferenciadores
NTGS es una empresa de capital íntegramente español especializada en sistemas portamorteros con presencia en los cinco continentes, según la propia compañía. Su producto estrella, el sistema Alakran, incorpora una doble placa base patentada que, afirma NTGS, le permite integrar morteros de mayor calibre (hasta 120 mm) manteniendo la estabilidad y seguridad del vehículo durante el disparo.
La empresa advierte además sobre intentos de imitación en el mercado —incluyendo alguno en España— de sistemas que usan una placa base simple y que, según NTGS, transmiten mayores fuerzas de retroceso al vehículo, lo que podría provocar daños estructurales. NTGS añade que no existen evidencias públicas de que esos sistemas imitadores hayan sido empleados con cargas altas de forma segura. Por el contrario, remarca que su doble placa base permite, en su experiencia, operar de manera segura con granadas de 120 mm a máxima carga incluso sobre superficies como el asfalto.
NTGS subraya que estas capacidades y su historial operativo explican por qué el Alakran está en servicio activo en distintos países y continentes, y recuerda además premios de innovación tecnológica recibidos en países como Polonia o Reino Unido, según la compañía.