La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha presidido la firma del contrato para la fabricación de 348 vehículos de combate sobre ruedas (VCR) 8X8 ‘Dragón’, con una duración de diez años.
El VCR 8×8 servirá para renovar la actual flota de BMR y VEC del Ejército de Tierra y será fabricado en diferentes configuraciones, se prevé que el proyecto genere cerca de 9.000 empleos
La ministra también ha indicado que este contrato es otro ejemplo de la apuesta que se hace desde el Ministerio por la industria española de la Defensa. “Entendemos que es esencial y fundamental, y no podemos concebir una Europa con seguridad y defensa si no es con poderío industrial” y ha subrayado que este programa “es fundamental para la modernización de nuestras Fuerzas Armadas y, concretamente, para el Ejército de Tierra”.
Por parte del Ministerio de Defensa, ha rubricado el contrato el subdirector general de Adquisiciones de la Dirección General de Armamento y Material, y por parte del Tess-Defence SA, su director general.
El acto ha contado también con la presencia del jefe de Estado Mayor del Ejército de Tierra, general de Ejército Francisco Javier Varela, el secretario general de Política de Defensa, almirante Juan Francisco Martínez Núñez, y de los representantes de las cuatro empresas que conforman Tess-Defence SA: Sapa Operaciones SL, Indra Sistemas SA, Escribano Mechanical & Engineering SL, y Santa Bárbara Sistemas SA.
Con esta firma, se pretende alcanzar el objetivo del 70% de participación de la industria nacional en la fase de desarrollo y producción del VCR 8X8 y se gestionará y mantendrá la Autoridad de Diseño del vehículo, asegurándose en el futuro de la ejecución del apoyo a su ciclo de vida. Este proyecto nace con una clara vocación de exportación que permitirá posicionar internacionalmente a la industria española de Defensa en un mercado altamente competitivo.
El programa de adquisición del blindado sobre ruedas servirá para renovar la actual flota de BMR y VEC del Ejército de Tierra, proporcionará a nuestros soldados una mayor seguridad y protección en sus misiones, mejorando sus capacidades para operar en escenarios de alta, media o baja intensidad.
Este desarrollo, totalmente español, aporta a la industria nacional soberanía tecnológica sobre un sistema de carácter estratégico que representa un factor prioritario en el sector de la Defensa de cara a su proyección, tanto interior como exterior, fomentando el desarrollo de industrias tecnológicas propias.
El efecto multiplicador y de innovación recaerá principalmente sobre las Comunidades Autónomas de Asturias, Madrid, País Vasco y Andalucía, dado que es dónde están localizadas las fábricas de las industrias participantes. Pero su potencial tractor generará una expansión de la actividad económica con una repercusión directa en la creación de empleo cualificado en España (aproximadamente 8.750 puestos de trabajo entre directos, indirectos e inducidos durante la duración prevista de la ejecución del contrato).
Fuente: Ministerio de Defensa