La jornada de este jueves estuvo marcada por la botadura de la fragata F-111 Bonifaz, primera unidad del programa F-110. El acto, celebrado en el astillero de Ferrol, se dividió en dos momentos: por la mañana, la firma del hito de aceptación de la botadura, y por la tarde, la ceremonia de puesta a flote presidida por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y amadrinada por S.M. la Reina Doña Sofía.
La firma de la aceptación de botadura
En la sesión matinal, la ministra de Defensa, Margarita Robles, destacó que la construcción de la Bonifaz refleja “la apuesta decidida del Ministerio por la modernización y mejora de recursos para nuestras Fuerzas Armadas”. Subrayó, además, la repercusión económica del programa: una inversión de casi 4.900 millones de euros, con más de 5.700 empleos directos e indirectos, y la participación de más de 500 empresas.
Robles también incidió en que la industria de defensa impulsa tecnología, innovación y alta capacitación, permitiendo alumbrar “una fragata multipropósito entre las más modernas y capaces del mundo”. Recordó que la botadura incluso se ha adelantado respecto a lo previsto inicialmente, lo que considera prueba del compromiso del Ministerio y de Navantia.


La botadura en Ferrol
Ya por la tarde, la ceremonia de botadura reunió a autoridades nacionales y autonómicas. El presidente Pedro Sánchez calificó la Bonifaz como “un símbolo del progreso de España”, fruto del talento y esfuerzo de miles de trabajadores y trabajadoras.
El jefe del Ejecutivo remarcó que la fragata traerá consigo más de 4.300 millones de inversión y 9.000 empleos, y que “va a surcar los océanos como estandarte de nuestra capacidad tecnológica y de nuestro compromiso con la seguridad europea e internacional”. También subrayó la importancia de este proyecto dentro de la OTAN y la UE.
Sánchez vinculó este hito naval con la transformación industrial que vive España, situando al país como referente en exportaciones y capacidad tecnológica. “España es y será una nación abierta, próspera e industrial”, concluyó.


El programa F-110: modernización y futuro
La fragata F-111 es la primera de las cinco unidades del programa F-110, que sustituirán progresivamente a las fragatas de la clase Santa María (F-80). Se trata de buques de última generación, diseñados para escenarios de alta intensidad, con sistemas avanzados de combate, sensores y capacidades de respuesta frente a amenazas múltiples.
El desarrollo del programa ha modernizado por completo el astillero de Ferrol, con la creación de la primera fábrica digital de bloques robotizada y la implantación del Gemelo Digital, situando a Navantia como referente internacional.
Más de medio millar de empresas y universidades españolas participan en el proyecto, entre ellas Indra, Ingeteam, GMV, Tecnobit, SAES o las universidades Politécnica de Madrid, Carlos III y Vigo. El pico de carga de trabajo está previsto para 2026, con tres fragatas en producción simultánea.
Con este programa, España refuerza su autonomía estratégica, impulsa la industria nacional de defensa y se posiciona en el mercado internacional de exportación naval con una de las fragatas más modernas del mundo.