Las inversiones en programas de modernización militar han aumentado. En particular, el 18 de abril, el Gabinete aprobó una inversión de unos 5.000 millones de euros, y en reunión del 11 de abril se aprobaron otros 3.000 millones de euros para helicópteros EF-2000, NH-90 o vehículos de combate de ruedas 8×8 (VCR).

«En términos de Defensa, y al igual que en todos los países socios y aliados, España está consolidando un marco de financiación estable para dotar a las Fuerzas Armadas de las capacidades necesarias para desarrollar con eficiencia sus misiones y operaciones, tanto las permanentes como las que despliegan en el exterior, así como misiones que se consideren necesarias para preservar la seguridad y bienestar de la sociedad española frente a graves riesgos, catástrofe, calamidad u otras necesidades públicas». Así, el Informe Anual de Seguridad Nacional para 2022, recientemente publicado, demuestra la urgencia económica introducida por el Gobierno español, a pesar de las reticencias de Unidas Podemos.

La apuesta de España por la inversión en armamento es coherente con el conocimiento de que Estados Unidos ha aprobado la venta a Marruecos de los lanzamisiles que suministró a Ucrania. Está equipado con 18 lanzadores HIMARS con un alcance de 82 a 305 km y 112 misiles tierra-tierra de tres tipos.